Volvía de un tema en Cullera. Lo bueno de las carreteras secundarias es que puedes parar sin montar un pollo. El arroz ya había crecido lo suficiente para que los campos se vean verdes y la garza me hizo gracia. Como en Valencia cada poquito se encuentra una excusa para hablar de arroz, paré.
Es apropiada por tres razones. El pasado fin de semana, escapada familiar al delta del ebro. El mismo paisaje, los mismos pájaros con distintas anillas.
Por qué estos días es noticia la llegada de un buen montón de aves migratorias al parque natural de la albufera.
Y... había otra, pero ahora no caigo.
Garceta común. Pinedo, Valencia. Jun. 2008
5 de agosto de 2008
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7 comentarios:
lo verde... como la puerta
y tan verde. bonita garza.
Mira que te gustan los pajaritos :)
Estoy en Valencia. A ver si nos tomamos unas cañas, ¿si?
Mua!
Biel: Eso era. :-)
Aapa: Gracias.
Rebeca: Si que me gustan, aunque lo cierto es todos los bichos somos bastante llamativos. A mí, que conozca, solo me desagradan los mosquitos, que confundan mi territorio con su coto de caza.
Ya te estoy llamando. :-)
Los arroces míticos del vecino! La cuarta razón!
Verde (manzanita)
http://es.youtube.com/watch?v=f5UdpFDh6os
Un fiera. Empaz descanse
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